Planifica tu Huerto. Cómo Organizar la Huerta y empezar a cultivar
Instalar un nuevo huerto no es una tarea que pueda improvisarse. Para planificar el huerto primero hay que tener en cuenta y decidir varios puntos clave. Es importante saber cómo organizar un huerto y decidir algunos aspectos, como la orientación o las especies que se pueden plantar, antes de comenzar a cultivar.
Hoy veremos las cosas más importantes que hay que considerar y decidir para planificar la huerta y empezar a cultivar en casa.
Cómo Organizar un Huerto paso a paso
Como hemos visto en la introducción, para planificar el huerto hay que decidir varios aspectos importantes antes de empezar a cultivar. Vamos a ver cuáles son estos primeros pasos para organizar el huerto desde cero.
1. Orientación del huerto ¿Dónde situarlo?
¿Dónde poner el huerto? Hay muchas opciones, pero lo principal es que sea un lugar soleado, con acceso al agua de riego (si es que vamos a optar por instalar un sistema de riego automático), y no sometido a un viento predominante.
Si vamos a situar el huerto en la azotea o en algún otro lugar con vientos fuertes o a pleno sol durante todo el día, puede ser necesario colocar algún elemento que los atenúe, como una tela o mallas de sombra para proteger los cultivos.
Con la orientación norte-sur se aprovecha mejor la luz durante todo el día, pero hay plantas, como las hortalizas que necesitan poco sol, que no necesitan demasiada luz.
2. Qué plantas cultivar en el huerto
Hay muchas opciones, no sólo las típicas hortalizas y verduras. En los huertos también se plantan flores, plantas aromáticas, setos de frutos silvestres y otras plantas beneficiosas que favorecen la biodiversidad y nos ayudarán a mantener alejadas las plagas.
La elección de las plantas del huerto tiene en cuenta muchos aspectos (los detallamos abajo, en el último apartado del post, donde veremos con más detalle qué plantas se pueden sembrar).
3. Tamaño del huerto
En función de la producción que queramos obtener y del espacio disponible, determinaremos el tamaño que tendrá nuestro huerto. Hay varios tipos de huertos en función de los recipientes de cultivo o de su colocación, y esto depende del espacio que tengamos para instalar el huerto.
Si tenemos una pequeña terraza podemos hacer, por ejemplo, un huerto en mesas de cultivo. Para espacios pequeños van muy bien los huertos verticales o los macetohuertos, mientras que si disponemos de un pequeño jardín podemos optar por el huerto en bancales. (Más información en el post sobre tipos de huertos urbanos).
4. Elegir los recipientes de cultivo
En el caso de que no dispongamos de un pequeño terreno para instalar el huerto en bancales o en el suelo, habrá que optar por los recipientes de cultivo.
Hay muchas opciones: mesas de cultivo, macetas cerámicas, macetas biodegradables, recipientes reciclados, jardineras, sacos geotextiles… En el post sobre los tipos de recipientes de cultivo podéis encontrar estas y otras ideas para organizar el huerto en poco espacio.
5. Elegir el sistema de riego
Hay varios tipos de sistemas de riego para el huerto, aunque los más recomendados y comunes en huertos ecológicos son los sistemas de riego localizado que favorecen el ahorro de agua, como el riego por goteo, la microaspersión o la cinta exudante.
Si no tenemos un huerto muy grande, podemos optar por regar manualmente con regadera o manguera (nos ahorraremos tener que planificar el montaje del riego).
6. Colocación de los cultivos en el huerto
Hay que planificar el marco de plantación o distancia entre plantas en función de las especies que hayamos elegido (tamaño de las plantas y tipo de raíces).
También hay que tener en cuenta la compatibilidad o incompatiblidad entre especies (hay hortalizas que no conviene poner juntas y otras que tienen asociaciones beneficiosas con ciertas plantas).
Para elegir la mejor colocación de las plantas del huerto nos ayudará mucho la técnica de la asociación de cultivos compatibles de la que hablaremos en el último apartado del post.
7. Planificar la siembra y plantación
Para hortelanos principiantes o con poca experiencia se recomienda adquirir las plántulas o plantones en viveros o centros de jardinería, ya que sólo será necesario comprar el número de plantas que queremos cultivar.
Si vamos a usar semillas porque preferimos empezar el cultivo desde cero, normalmente primero habrá que hacer semilleros un tiempo antes de la época de plantación (sobre todo en el caso de cultivos delicados).
A la hora de hacer un semillero casero muy importante la calidad de la semilla, por lo que lo mejor es comprar semillas ecológicas certificadas, que garanticen la ausencia de productos químicos añadidos y de modificaciones genéticas, o la obtención de semillas de nuestra propia cosecha, tarea que debe realizarse con los conocimientos adecuados para la extracción de semillas en cada especie. (En el Capítulo 1 del Manual GRAMA -ver Referencias– se especifican los procesos de extracción de semillas según la familia a la que pertenezca la planta).
8. Elegir el tipo de sustrato y abono
Si la opción elegida para cultivar el huerto urbano ha sido la de utilizar recipientes de cultivo (mesas elevadas, macetas, jardineras, contenedores reciclados etc.) hay que conseguir el sustrato para rellenarlos.
Se puede comprar un sustrato universal o confeccionar nuestro propio sustrato ideal mezclando componentes como arenas, humus, compost, fibra de coco, etc. Tenéis toda la información sobre la tierra para huertos en el post ¿Cuál es el mejor sustrato para el huerto?
9. Planificar las labores de cultivo
Después de planificar el huerto teniendo en cuenta las especies elegidas, los recipientes de cultivo, el tipo de riego, etc. es hora de empezar a cultivar.
Tras la siembra y plantación, debemos llevar a cabo ciertas tareas para mantener sanas las plantas, como la prevención de plagas o la protección del suelo. En el post sobre Tipos de labores de cultivo para cuidar las plantas del huerto encontraréis más detalles sobre estas tareas que es importante conocer si queremos prever con antelación las herramientas o el tiempo que necesitaremos para sacar adelante el huerto.
Elegir los cultivos del huerto: qué plantas se pueden sembrar
Utilizando especies distintas contribuimos a la sostenibilidad ya que se incrementa la biodiversidad y se favorece la lucha integrada contra plagas, no sólo por la variedad de las plantas, sino también por la diversidad de insectos beneficiosos que éstas atraen.
A la hora de elegir qué plantas sembrar en el huerto puede ser útil pensar en plantas menos comunes en el mercado o más caras y en aquellas más fáciles de cultivar (además de en nuestros gustos, ¡por supuesto!). Aquí os dejo un par de listados que he sacado del libro «Huerto urbano sostenible» (Pérez y Velázquez, 2013):
- Plantas fáciles de cultivar y relativamente más caras en el mercado: acelgas, brócoli, calabacín, coles de bruselas, espinacas, frutas del bosque, habas, judías, lechugas, nabos, puerros, remolacha, tirabeque.
- Plantas baratas en el mercado y difíciles de cultivar: apio, ajo, calabazas, cebollas, coliflores, guisantes, melones, patatas, tomates, zanahorias.
Es recomendable plantar algún tipo de leguminosa (judías, habas, lentejas, guisantes…), ya que éstas aportan nitrógeno al suelo de forma natural y así reduciremos la necesidad de aportes externos. En los artículos sobre rotación y asociación de cultivos puedes encontrar más combinaciones beneficiosas que te ayudarán a elegir qué especies cultivar en el huerto.
Hay muchas variedades distintas para cada especie pero, siempre que sea posible, conviene elegir variedades locales, que se desarrollarán mejor y serán más resistentes a plagas y enfermedades (Ver artículo sobre Las variedades locales).
Resulta interesante tener en cuenta para la elección de los cultivos de nuestro huerto conocer la compatibilidad entre plantas. Para planificar el huerto es importante pensar en colocar juntos cultivos compatibles y alejar aquellos incompatibles. Esta técnica de la asociación de cultivos es muy beneficiosa porque:
- Aumenta el rendimiento de los cultivos (obtendremos más cosecha).
- Eleva la concentración de nutrientes en el suelo y mejora su aprovechamiento y el de otros recursos como la luz o el agua.
- Contribuye a disminuir los ataques de plagas y enfermedades y la proliferación de malas hierbas.
A la hora de organizar el huerto resulta esencial conocer qué plantas de las que hemos elegido son adecuadas para cultivarse juntas y cuáles no. A esto hemos dedicado el artículo «Asociaciones de cultivos: compatibilidad entre plantas«. Además, tenéis más información sobre cultivos útiles en el huerto en el post Qué plantas cultivar en el huerto, que también os recomiendo leer.
Referencias
- Escrivá, M.G., 2006. Huerta Orgánica: Guía Esencial para la planificación, cultivo y mantenimiento de especies hortícolas con técnicas ecológicas. Ed. Albatros. ISBN: 9789502411248.
- Vallés, 2009. El huerto urbano. Manual de cultivo ecológico en balcones y terrazas. Ediciones Serbal. ISBN: 9788476285695.
- Asociación GRAMA, 2012. Manual del huerto. Grupo de Acción para el Medio Ambiente.
- Pérez, G. & Velázquez, C. 2013. Huerto urbano sostenible. Ed. Mundiprensa. ISBN: 9788484765486.
Revisado por: Prof. Dr. Luis Ruiz García el 06/03/2023