Plagas y enfermedades en los rosales: pulgones, manchas negras
¡Hola agrohuerters! Seguro que todos tenemos en la cabeza una persona a la que regalaríamos un ramo de rosas 🙂 ¡Y…, qué mejor manera de hacerlo que con unas rosas cultivadas por nosotros mismos, ¿no?! En el artículo de hoy, os daremos algunos consejos para identificar, prevenir y tratar las plagas y enfermedades más importantes de los rosales. De esta manera ya no habrá escusas para conseguir unas rosas bonitas y sanas.
Os recuerdo que cuando hablamos de plaga, nos referimos a que un grupo de artrópodos (ácaros, insectos, crustáceos,…), nematodos u otro tipo de animales están causando daños a nuestros cultivos. Sin embargo, cuando utilizamos el término enfermedad, hacemos referencia a: hongos, bacterias o virus.
Plagas en los rosales
Las principales plagas que podemos encontrar en los rosales son las siguientes:
Pulgones en el rosal
Pulgones, pulgones,… ¡Están en todas partes! Por ello, se considera que son una de las plagas más comunes en huertos y jardines. Nuestros rosales tampoco se librarán de ellos. Son insectos de pequeño tamaño entre 1-3 mm. Y, aunque los más comunes son de color verde, pueden presentar otros colores dependiendo de la especie.
La mayoría son polífagos, es decir, no tienen preferencia por una especie vegetal concreta. Atacan a los brotes jóvenes de cultivos con alto contenido en azúcares. Las larvas causan daños al hacer galerías en las hojas de las plantas. En cuanto a los adultos, se alimentan chupando la savia de las hojas, capullos y brotes jóvenes usando el estilete de su aparato bucal. Además, excretan un líquido azucarado y pegajoso denominado melaza que atrae a las hormigas (por eso muchas veces donde veáis pulgones, veréis hormigas).
En ocasiones, favorecen la aparición de un hongo conocido como negrilla y también pueden transmitir virus de unas plantas a otras.
Medidas de control contra los pulgones del rosal:
- Podar los brotes más afectados o eliminar los pulgones utilizando un pequeño pincel.
- El principal enemigo natural de los pulgones son las mariquitas. ¡Si ponéis mariquitas en vuestro huerto o jardín os mantendrán a los pulgones a raya!
- Echar por encima de los pulgones agua con jabón.
- Infusión de ajo o cebolla.
Por aquí os dejo una foto de una mariquita que pille el otro día en mis rosales a punto de comerse a los pulgones presentes.
Para más información, os recomiendo que leáis el artículo de cómo controlar a los pulgones.
Pequeños bichos rojos en el rosal: araña roja
Aunque se conoce como araña roja, se trata de una especie de ácaro. Recordad que no debemos confundir a los ácaros con los insectos. Los ácaros tienen 8 patas, al contrario que los insectos que tienen 6. Se localizan en el envés de las hojas y se identifican por presentar unas manchas oscuras en los laterales y gran cantidad de sedas.
En cuanto a su control, os dejo un enlace donde explicamos cómo combatir la araña roja en el huerto.
Orugas en los rosales
La más común es la falsa oruga del rosal (Arge rosae). Se la llama así porque en realidad no es oruga, sino la larva de una especie de avispa.
Estas falsas orugas miden entre 7 – 10 mm y se alimentan de las hojas, por lo cual provocan defoliaciones (destrucción de hojas), que pueden dañar seriamente el rosal.
Tratamiento: no existe un producto específico para esta plaga, lo que se utilizan son insecticidas de amplio espectro, que puedes encontrar en un tienda de jardinería favorita. Estos insecticidas también sirven para matar otros insectos que atacan los rosales, como por ejemplo los pulgones, que antes hemos mencionado.
Si no hay muchas, también se pueden eliminar a mano.
Otros bichos en los rosales
Además, existen otros insectos que pueden afectar a nuestros rosales como son la cochinilla algodonosa o algunas especies de orugas.
Enfermedades de los rosales
Entre las principales enfermedades de los rosales, destacan aquellas causadas por los hongos:
Puntos en las hojas de las rosas: La Roya
La roya es uno de los hongos más importantes, junto con el oidio. Necesita temperaturas suaves y humedad alta para desarrollarse. Suele aparecer tras largos periodos de lluvias abundantes. Es muy fácil identificarla: tenéis que fijaros si en el envés de las hojas hay unos abultamientos anaranjados y en el haz unas pequeñas manchas amarillas.
Manchas blancas hojas del rosal: Oidio
Este hongo aparece en forma de manchas blancas y se va transformando en un polvillo blanco-grisáceo. Gracias a ese polvo blanco, es uno de los hongos más fáciles de detectar. Normalmente se desarrolla en el haz de las hojas, aunque también puede extenderse por el tallo o los frutos. Su presencia dificulta la fotosíntesis. Si no lo controlamos bien, las hojas amarillean y se pueden secar.
La humedad y las temperaturas cálidas son las condiciones ideales para que aparezca el oidio en nuestro huerto.
Os dejo un artículo donde hablamos de cómo controlar el oidio.
Manchas negras en las hojas del rosal: Marssonina
Si en las hojas de vuestros rosales aparecen unas manchas negras y redondas… es marssonina. En el caso de que la infección esté muy avanzada puede provocar una defoliación (caída de las hojas). Requiere temperatura suave y presencia de agua, ya que se propaga por salpicaduras de lluvia.
Lo mejor para eliminarlo es quitar las hojas afectadas y destruirlas. Algunas personas recomiendan mezclar dos partes de leche con una de agua y echarlo en las hojas con ayuda de un spray.
Controlar los hongos de los rosales
No os perdáis el artículo sobre prevención y tratamientos ecológicos para los hongos del huerto.
Por último, os dejo una imagen que me parece muy ilustrativa y nos puede servir como resumen del artículo.
Referencias
- Leus, L. (2017). Selection Strategies for Disease Resistance in Roses. Reference Module in Life Sciences, Elsevier.
- Hegelund, J.N., Lütken, H., Müller, R. (2017). Postharvest Physiology: Ethylene in Roses. Reference Module in Life Sciences, Elsevier.
- Braun, U. (1980). Morphological Studies in the Genus Oidium. Flora. 170(1–2), 77-90.
Esto es todo por hoy, espero que os haya gustado el artículo y que no os quedéis con las ganas de regalar ese ramo de rosas.
¡Pasad un buen día! 🙂
Revisado por: Prof. Dr. Luis Ruiz García el 05/08/2020