Macetas biodegradables: Materiales reciclados para el huerto
A la hora de hacer un huerto ecológico hay que elegir y tener en cuenta numerosos aspectos y todos los elementos que van a integrarlo, como los recipientes de cultivo. Hay muchos tipos de recipientes de cultivo y la elección dependerá, entre otras cosas, de las plantas que se van a cultivar en el huerto y de si se requieren semilleros o no.
Las macetas biodegradables, por ejemplo, son una buena opción en plantas que se quieran sembrar en semilleros, ya que las macetas biodegradables harán esta función y luego, en la plantación, se enterrarán en el suelo evitando un trasplante más traumático para las raíces de la plántula.
Semillas, plantas y macetas ecológicas
Para empezar a cultivar un huerto ecológico es importante elegir las plantas que van a formar parte de él y saber de qué vamos a partir: si vamos utilizar semilla o planta. Si queremos un huerto ecológico , en ambos casos hay que asegurarse de que se utiliza material ecológico.
Para saber si una planta o semilla es ecológica tiene que tener un etiquetado especial que indique que es un producto procedente de la agricultura ecológica. Si elegimos la opción de comprar planta, ésta vendrá en un contenedor o maceta. Si queremos que nuestro huerto sea totalmente ecológico tendremos que tener en cuenta en qué tipo de maceta nos venden las plantas.
Características de una buena maceta para el huerto ecológico
La maceta ideal, tanto para el uso en viveros como para el uso en el hogar, tiene que tener una serie de características.
La primera de ellas es que tiene que ser de fácil manejo, tiene que facilitar tanto las operaciones que se vayan a realizar a la planta como el transporte. Además, tiene que favorecer el buen desarrollo de las raíces (debe tener unos orificios en el fondo, por ejemplo), y proporcionar unas buenas condiciones para el perfecto desarrollo de la planta (no calentarse demasiado, no filtrar el agua…).
El aspecto externo de la maceta también es importante para poder vender con facilidad las plantas. Si nos encontramos con macetas poco atractivas no compraremos las plantas. También es importante que nos ofrezcan un soporte seguro para nuestras plantas, no compraremos plantas cuyas macetas no sean buenas para el desarrollo de cualquier planta.
Las macetas que podemos encontrar en los viveros suelen ser de materiales plásticos como el prolipropileno, el polietileno de alta densidad, la resina de poliestireno o el termoplástico. Estos plásticos no proceden de materiales naturales, son sustancias químicas sintéticas (polímeros) y no son susceptibles de asimilarse de nuevo en la naturaleza. Aunque puedan ser reutilizados, su fabricación no entra dentro de lo ecológico, así que hay que buscar otro tipo de material para las macetas. Puede parecer que no existe alternativa a las macetas de plástico, sin embargo, hoy en día hay macetas o recipientes para plantas realizados en materiales biodegradables.
Las macetas biodegradables
Las macetas biodegradables están hechas de materias primas procesadas biológicas y ofrecen son una interesante alternativa a los recipientes convencionales hechos con materiales sintéticos.
Se distinguen dos grupos de macetas biodegradables dependiendo del material que se utilice para su fabricación:
- Macetas hechas de fibras vegetales como papel, fibra de madera, fibra de coco, yute o turba.
- Macetas hechas de materiales procesados hechas con materiales renovables de origen vegetal.
La característica fundamental de este tipo de macetas biodegradables es que, pasado un periodo de tiempo no muy largo, se degradan en el suelo y se transforman en materia orgánica que puede ser utilizada por la planta.
Normalmente, la degradación de las macetas biodegradables se produce después de un periodo de tiempo lo suficientemente largo como para que, mientras las plantas están en el vivero, la maceta no se descomponga y lo suficientemente corto como para que las raíces de las plantas se desarrollen con normalidad y no tengamos problemas con nuestro huerto una vez las hayamos plantado.
El uso de estas macetas biodegradables es directo. Esto quiere decir que la plantación se hace con la maceta, no es necesario retirar el recipiente para plantar en el terreno definitivo. Así nos aseguramos de que las raíces no han sufrido ningún daño en la plantación y podemos confiar en que la mayoría de las plantas van a desarrollarse sin problemas.
Ventajas de las macetas biodegradables
Sin embargo, estas macetas también pueden utilizarse como elementos ornamentales, sin haber distinción en cuanto a la apariencia con las fabricadas con materiales plásticos. Por lo tanto, se puede tener un huerto totalmente ecológico y a la vez un huerto decorativo. En el caso de que las macetas se empleen como un elemento ornamental no se degradarán ni transformarán en materia orgánica durante el periodo en el que mantengamos nuestras plantas. Una vez se han usado se pueden desechar y será entonces cuando se degraden sin causar daños en el medio ambiente.
Cualquier tipo de maceta biodegradable va a proporcionar las mismas características que las macetas de materiales plásticos. Se pueden usar en los mismos sitios en los que se usan las macetas de plástico porque aguantan tanto las altas como las bajas temperaturas sin afectar al desarrollo de las plantas. Incluso proporcionan mejores características de aislamiento frente a las altas temperaturas. Además los materiales de los que están hechas las macetas biodegradables son muy ligeros y facilitan mucho su manejo.
Los alimentos ecológicos tienen muchos beneficios y pueden ser un gran aporte para nosotros, pero también lo son para el medio ambiente. Obtenemos productos de mejor calidad y más saludables, pero además estamos contribuimos a una mejora del medio ambiente mediante el uso de productos o materiales no dañinos, como es el caso de estas macetas biodegradables en lugar de las macetas de plástico convencionales.