Cómo sembrar calabazas o zapallos turbante: Guía completa
¡Hola a todos! Queréis ver cómo sembrar Calabazas turbante? Lo prometido es deuda, así que hoy os traigo un nuevo vídeo de «Agricultura para RURBANITAS«. Este nuevo vídeo es una continuación del artículo «Cómo preparar el terreno y hacer surcos«, ya que utilicé esos mismos surcos para realizar la siembra de calabazas turbante. Pero antes de nada, vamos a conocer un poco más sobre esta variedad de calabazas.
¿Qué son las calabazas turbante?
Ya hablamos en un artículo sobre cómo cultivar calabazas, por lo que no voy a centrarme demasiado en ello, pero sí me gustaría hablar un poquito más en concreto de la calabaza turbante.
Esta variedad de calabazas recibe este nombre debido a su forma que, como podéis imaginar, es similar a la de un turbante turco. La mayoría poseen la parte superior color rojo y la inferior veteada con los colores rojo, verde y blanco; haciendo un juego de colores de muy llamativo contraste. La parte inferior es mucho más ancha que la superior y ambas se separa por una marcada estría.
El tamaño es mediano aunque en EEUU han logrado variedades de más de 2kg. Se cultivan más por su valor ornamental que por el sabor o cantidad de su pulpa; ya que tienen muchos sectores huecos en su interior.
Es por ello que puede ser interesante para prepararlo relleno, a modo de recipiente, ¡no vas a encontrar un plato más original! Es una variedad muy sabrosa, con carne poco harinosa y dulce, ideal para hacer purés y mermeladas.
Sin embargo, no son muy habituales, porque a diferencia de otras calabazas que aguantan frescas mucho tiempo, estas se conservan solo 30 días debido a la delgadez de su piel en comparación con otras variedades más gruesas.
Yo las vi, y no me pude resistir a cultivarlas, ¿podrás tú? ¡Seguro que tampoco! Así que voy a enseñarte cómo sembrarlas.
Cómo sembrar calabazas turbante
Lo primero, primerísimo y esencial: házte con unas semillas. Yo elegí cultivar calabazas turbante porque me llamaron mucho la atención, pero realmente elige lo que más te apetezca, siempre y cuando sea la época de siembra. Normalmente, en los sobres de semillas viene dibujado un calendario donde nos indican tres cosas:
Siembra
Época de siembra: marca los meses adecuados para la siembra de un cultivo determinado. En ocasiones este período puede ser corto y en otras muy largo, incluso extenderse durante todo el año, o puedes encontrarte varios periodos de siembra, por ejemplo, primavera y otoño. Asegúrate de que estás en el momento adecuado si vas a sembrar.
Trasplante
Época de trasplante: Sirve para tener una idea de cuándo es el momento de pasar tus plantas del semillero al suelo o el recipiente de cultivo final. Como digo, es una referencia porque ese tiempo lo van a marcar tus plántulas según su desarrollo.
Recolección
Época de recolección: Cuándo se supone que vamos a tener listo nuestro cultivo. También es muy relativo porque es una fecha que va a marcar el propio fruto o cultivo con su desarrollo.
Calabazas ecológicas
Una vez que te has asegurado de que es el momento correcto, debes tener algo más en cuenta. Si quieres que tu cultivo sea totalmente ecológico, debes asegurarte de que las semillas que compras también lo son, así que si eso es lo que deseas busca el sello que garantice que esas semillas que estás adquiriendo han sido obtenidas siguiendo las directrices de la agricultura ecológica. Es posible que te sea difícil encontrarlas, aunque cada vez están más extendidas en los centros de jardinería o en internet. Si no las encuentras, no te preocupes, aunque empieces con semillas no orgánicas, el resto del desarrollo de cultivo puedes hacerlo de manera ecológica.
Suelo para siembra de calabazas
Ahora que ya tenemos las semillas en nuestras manos, nos dirigimos al terreno de siembra. Puede ser el sustrato de una maceta, un semillero o directamente el suelo. Como os he dicho, yo utilicé los surcos que había preparado, pero eso ya lo dejo a vuestra elección. Si vais a regar por goteo, no hace falta que hagáis surcos, pero sí son aconsejables en el riego por superficie, es decir, con manguera, porque evita que la planta esté en contacto directo con el agua, evitando así enfermedades de tipo fúngico en el tallo.
Vamos a realizar unos orificios en el terreno de unos 4 cm de profundidad para la calabaza turbante. Si no habéis elegido calabazas y vais a sembrar otro cultivo, la profundidad del orificio debe ser el doble del tamaño de la semilla, para que tengáis una referencia.
Algo importante es la distancia o marco de siembra. La calabaza necesita mucho espacio porque se desarrolla mucho, así que dejad al menos un metro entre orificios. Si sembráis otro cultivo, consultad sus marcos de siembra para que puedan desarrollarse correctamente.
Os recomiendo que pongáis al menos 3 semillas en cada orificio de siembra para asegurarnos de que alguna germina. Si germina más de una, os aconsejo que hagáis un aclareo, es decir, separadlas y eliminadlas o plantadlas en otro lugar, para evitar que ambas plantas compitan por los recursos, de tal manera que finalmente sólo se desarrolle una planta por orificio.
Por último, tapad los orificios y añadid un poco de agua. ¡Ya sólo queda esperar a ver los primeros brotes!
¡Esto es todo por hoy! Espero que os haya gustado tanto el artículo como el vídeo y, sobre todo, que os ayude a realizar una buena siembra. ¡Hasta la próxima Agrohuerters!
Revisado por: Prof. Dr. Luis Ruiz García el 04/03/2021