Bichitos en las hojas de las plantas. ¿Qué son y cómo eliminarlos?
Es muy normal que aparezcan bichitos en las hojas de las plantas de tu huerto. Ya sabemos que el término «bichitos» no es muy correcto técnicamente, pero también es cierto que es una palabra que se utiliza habitualmente, para referirse a diversos tipos de insectos pequeños como pulgones de todo tipo, pequeños escarabajos, hormiguitas y también referirse a ácaros como la araña roja o la araña blanca.
Este artículo surge a raíz de una consulta de mi amigo Daniel quien nos enviaba hace poco esta imagen de una planta:
Bichitos en las hojas: ¿Qué son?
La imagen no es de la mejor calidad, pero sí que apreciamos una hoja de un árbol, que parece ser una rosácea, algo parecido a bichitos blancos rodeados de un líquido transparente que parece ser melaza. Es complicado dar un veredicto asegurando al cien por cien qué tipo de plaga es, puesto que desde la distancia y mediante una foto el reto se hace mucho más difícil, pero en este caso, después de darle unas cuantas vueltas, pensamos que se trata de pulgones, pero… no de pulgones vivos, sino de sus mudas.
Pero ¿qué es la muda? La muda es un proceso que tiene lugar en muchos insectos durante su desarrollo en el estado juvenil y que consiste en deshacerse del exoesqueleto (un esqueleto externo continuo que recubre, protege y soporta el cuerpo del insecto) que, al estar endurecido, no permite al insecto crecer por lo que lo mudan para poder hacerlo. El exoesqueleto mudado queda como residuo en las hojas, y por ello nos hace dudar sobre qué tipo de insecto tenemos, pues tienen la forma externa de, en este caso, los pulgones, pero está «vacío por dentro». De cualquier manera, aunque en ese momento no hubiera pulgones, los restos de la muda y la melaza nos han ayudado a saber qué tipo de insecto había estado alimentándose de aquella hoja.
Los pulgones son algunos de los «bichitos» que podemos encontrar en nuestros cultivos, pero hay muchos más, y no todos tienen por qué ser perjudiciales, algunos nos pueden ayudar a combatir otras plagas, y son los que conocemos como enemigos naturales. Así que vamos a hacer un breve resumen de estos «bichitos malos» que podemos ver en las hojas de nuestros cultivos.
Los bichitos más comunes en las plantas
Estos son algunas de las plagas más comunes que se pueden encontrar en plantas del huerto y en hornamentales del jardín.
Pulgones en las plantas
Para mí son los más fáciles de reconocer por varios aspectos. En primer lugar, todos los estados de desarrollo son muy similares, solo varía su tamaño.
Son bichos pequeños (no más de pocos milímetros), sobre todo verdes, amarillos o negros. El cuerpo de los pulgones es blando y tiene forma globosa y pueden ser ápteros (sin alas) o alados. En este caso tienen dos pares de alas membranosas, relativamente pequeñas y transparentes. En segundo lugar están los sifones o cornículos, un par de apéndices erectos con forma de trompeta y situados al final del abdomen que se pueden apreciar fácilmente al trasluz, por los que vierten sustancias y feromonas con distintas funciones entre las que se encuentra la de repeler a sus depredadores naturales.
Por otro lado está la melaza, una secreción azucarada y pegajosa que expulsan por el ano producto de la digestión, por lo que, donde hay pulgones normalmente hay melaza.
Hormigas y pulgones
Y por último, tenemos las hormigas, sus fieles aliados. Los pulgones han desarrollado en la evolución una relación casi simbiótica con las hormigas, que no sólo los toleran sobre las plantas, sino que los protegen de sus depredadores, insectos beneficiosos como las mariquitas o las crisoperlas, a cambio de la secreción de melaza que les sirve de alimento, así que si ves hormigas y dudas, seguro que son pulgones.
Los daños directos causados por los pulgones se deben a las heridas producidas al clavar el estilete (aparato bucal en forma de aguja) en los tejidos para alimentarse y la absorción de la savia de la planta produciendo un debilitamiento generalizado, reducción del crecimiento y amarilleamiento de la planta. Pero más importantes aún son los daños indirectos.
La melaza sirve de soporte de la «negrilla», un hongo de color oscuro que reduce el proceso de fotosíntesis y deprecia los frutos. Además, los pulgones son vectores de gran cantidad de virosis que transmiten a las plantas al alimentarse.
En este artículo podéis descubrir más cosas sobre los pulgones y cómo eliminarlos de forma ecológica.
Moscas blancas en las hojas
Realmente no son moscas, pero reciben ese nombre por su similitud con éstas. Son muy pequeñas y de color blanco, incluidos sus dos pares de alas.
Normalmente, prefieren el envés al haz de las hojas, y si son muy verdes, es decir, tienen mucho nitrógeno, mejor que mejor. Los daños que producen son casi los mismos que los pulgones, siendo también en este caso muy importante su capacidad para transmitir virus a las plantas a las que atacan.
Hay varios métodos ecológicos para eliminar la plaga de mosca blanca, pero uno de los más efectivos es la utilización de trampas amarillas. Estas trampas pueden capturar cientos de moscas blancas en tan solo unas horas.
Bichitos blancos en las plantas: Cochinillas
Estos insectos varían mucho en apariencia, desde organismos muy pequeños (1-2 mm) de cubiertas blancas, como polvorientas, hasta bolas brillantes de unos 5 mm y cubiertas con cera melosa, aunque son muy fáciles de identificar.
Mientras que los machos no se alimentan de las plantas y tienen alas, las hembras (que son las que vemos en nuestros cultivos) son larviformes y desprovistas de alas y permanentemente están fijadas a las plantas que parasitan. Además, secretan una cobertura de cera para su defensa en forma de escudo, cuya forma varía según la especie.
Los daños causados son similares a los anteriores, exceptuando la trasmisión de virosis. En este caso es más importante la aparición de «negrilla» por culpa de la excreción de melaza.
A nivel comercial, son importantes los daños estéticos, como decoloraciones, que causan en los frutos. En este post podéis leer remedios ecológicos para eliminar la plaga de cochinilla algodonosa.
Psilas
Es uno de los bichitos más difíciles de identificar. El adulto tiene forma de una langosta alada muy pequeña, con una cabeza muy voluminosa.
Las ninfas (estado juvenil) tienen una forma aplastada y son de color amarillo claro en el momento que salen del huevo, pero va tornándose a verde a medida que crecen. Las hembras ponen gran cantidad de huevos por lo que pueden tener varias generaciones al año.
Bichitos negros en las plantas: Trips
Seguro que todos habéis cogido una margarita en el campo y tenía algunos «bichitos» muy pequeños y negros correteando por encima, pues esos son los trips. Son insectos de tamaño pequeño (1 – 6 mm), de forma cilíndrica, alargada y con el extremo posterior muy agudo.
Son de color marrón o negro y hay especies ápteras (sin alas) y aladas. En este último caso las alas son muy estrechas, y rodeadas de unos filamentos, como en forma de flecos, que les dan aspecto de plumas. Los trips nos dan una de cal y otra de arena. Por un lado, algunas especies son plaga debido al daño que causan al alimentarse de flores o de verduras a las que decoloran o producen deformidades que las hacen menos rentables.
Además, estos diminutos bichitos pueden actuar como vectores de más de 20 virus, incluyendo algunos de los virus más dañinos, como el virus del bronceado del tomate. Sin embargo, muchos otros sirven como enemigos naturales y nos ayudan a luchar contra otros insectos perjudiciales.
En este post que escribí sobre los trips de las flores podéis encontrar algunos de los remedios más usados para acabar con los trips de las hojas de las plantas y evitar daños graves.
Chinches
Estos insectos tienen las piezas bucales formando una estructura en forma de pico denominada rostro adaptado para perforar y succionar líquidos de plantas. En general poseen dos pares de alas, donde las anteriores, denominadas hemiélitros, tienen la mitad endurecida y la otra mitad membranosa, característica que los diferencia de otros grupos de insectos. Al igual que los trips, los chinches pueden ser plaga o grandes aliados que devoran a otros insectos dañinos.
Referencias
- Healey, M., Senior, L., Brown, P., Duff, J. (2017). Relative abundance and temporal distribution of adult Frankliniella occidentalis (Pergande) and Frankliniella schultzei (Trybom) on French bean, lettuce, tomato and zucchini crops in relation to crop age.Journal of Asia-Pacific Entomology, 20(3), 859-865.
- Abrol, D., Shankar, U. (2016). Chapter 20-Integrated Pest Management. Editor(s): Surinder Kumar Gupta, Breeding Oilseed Crops for Sustainable Production. Academic Press, 523-549.
- Riley, D., Sparks, A., Srinivasan, R., Kennedy, G., Fonsah, G., Scott, J., Olson, S. (2018) Chapter 3 – Thrips: Biology, Ecology, and Management. Editor(s): Waqas Wakil, Gerald E. Brust, Thomas M. Perring, Sustainable Management of Arthropod Pests of Tomato. Academic Press, 49-71.
Estos son solo algunos de los «bichitos» que nos podemos encontrar. He elegido los más visibles, ya sea por tamaño, porque salen durante el día o porque se juntan en grandes grupos que son más fáciles de apreciar; sin embargo, hay muchísimos más, más difíciles de ver e identificar, aunque intentaremos hablar de ellos también en próximos artículos. ¡Espero que os sirva de ayuda!
Revisado por: Prof. Dr. Luis Ruiz García el 05/08/2020