7 Tipos de Huertos Urbanos, sus objetivos y beneficios
Aquí esta la continuación al post «Cómo son los huertos en las ciudades», en el que os hablaba de los principales tipos de huertos urbanos. Pues bien, ahora voy a explicar un poco las particularidades de cada uno de ellos.
¿Qué tipos de huertos urbanos hay? ¿Cómo son los huertos en las ciudades? A continuación veremos una lista con varios tipos de huertos, varias formas de agricultura urbana con distintos objetivos pero con multitud de beneficios.
1. Huertos privados con ánimo de lucro
Los propietarios de estos huertos los cultivan y venden a sus clientes (particulares, restaurantes o grupos de consumo) los productos ecológicos cosechados. Un ejemplo son los invernaderos ecológicos de Apadrinauntomate (bueno… lo sería si estuvieran en una gran ciudad, quiero decir… porque en estas huertas están en un paraje rural, en Cantabria).
También pertenecen a este grupo los huertos de alquiler o huertos de ocio: terrenos privados en los que se alquilan pequeñas parcelas a los horticultores urbanos, como los huertos de Tomba L’Olla, en Valencia. Los usuarios particulares pagan cuotas mensuales o anuales por sus huertos en las que suelen estar incluidos servicios como el riego, herramientas necesarias para el cultivo, asesoramiento profesional, etc.
En el artículo Huertos urbanos: crea, alquila comparte, podéis conocer más sobre más tipos de huertos de alquiler o huertos compartidos.
2. Huertos caseros o huertos familiares
Huertos privados cultivados en el interior de las casas, patios, jardines o balcones de los propietarios.
Hay muchas modalidades, ya que su forma depende del espacio y del tiempo disponible: huertos en macetas o macetohuertos, huertos en mesas de cultivo, huertos en bancales o directamente en el suelo, huertos verticales… Podéis leer más sobre esto en el post sobre la clasificación de huertos caseros.
3. Huertos de ocio públicos
Los huertos públicos se establecen en parcelas cedidas (o en alquiler) que se encuentran en terrenos públicos gestionados por administraciones estatales o municipales. Normalmente se emplean para el cultivo ecológico y la enseñanza de técnicas sostenibles.
La administración se encarga de la gestión y mantenimiento de las instalaciones, y establece las adjudicaciones de las parcelas, los horarios, normas de uso, etc. Un ejemplo es el huerto del Retiro, en Madrid.
En muchos casos, los huertos públicos están destinados a grupos sociales concretos, como personas mayores, desempleados, niños, o personas en situación de exclusión social, etc.
Los principales objetivos de los huertos municipales y otros huertos públicos son: la recuperación y conservación de los espacios urbanos y de las variedades locales, la práctica y difusión de la agricultura ecológica, el aprovechamiento educativo y formativo, y la creación de espacios de socialización, especialmente para los colectivos más vulnerables.
4. Huertos urbanos comunitarios
Los huertos comunitarios se sitúan normalmente en terrenos públicos o propiedades vecinales (que son cedidos a la comunidad de hortelanos), y son espacios gratuitos y de libre acceso, donde los vecinos de la zona trabajan para sacarlos adelante gracias al trabajo en equipo y teniendo presente las técnicas agroecológicas para la obtención de alimentos más sanos y naturales.
Un ejemplo es el Huerto Comunitario El Campo de Cebada, os recomiendo que leáis el post de nuestra visita a este huerto ecológico en pleno centro de Madrid.
En estos huertos hay personas de todas las edades, ideologías y culturas (ya que todo el que quiera puede entrar a formar parte de la “comunidad de hortelanos” de un huerto comunitario), por lo que se comparten conocimientos y experiencias que resultan útiles, enriquecedoras, y hasta terapéuticas. También se fomentan valores y actitudes sociales básicas, como la tolerancia, la solidaridad o el respeto al medio ambiente.
5. Huertos didácticos
Hay varios tipos de huertos cuyo objetivo es la educación ambiental, la formación agraria o el apoyo a la educación básica.
Algunos ejemplos son los huertos escolares, los huertos establecidos en instalaciones públicas (universidades, centros educativos, etc.), como el Huerto ecológico en Agrónomos o el Aula Verde Invernadero Didáctico, o los huertos didácticos colectivos, en los que las personas que participan en ellos colaboran en el mantenimiento del huerto mientras organizan actividades o cursos gratuitos pensados como una práctica de aprendizaje.
En estos huertos, la organización se encarga de enseñar a los participantes las técnicas de cultivo y sensibilizarlos en cuestiones ambientales, como hacen en la HuertAula Cantarranas, que visitamos hace unos meses.
6. Huertos terapéuticos
El trabajo en horticultura y jardinería supone una alternativa de ocio y recuperación para todo tipo de pacientes y colectivos vulnerables. Estas personas aumentan así sus posibilidades de distracción a la vez que promueven su bienestar físico y psicológico.
El huerto como terapia es cada vez más considerado por los terapeutas de todo tipo de centros, de ahí que cada vez sean más comunes los huertos en residencias de ancianos, en centros de inserción social, huertos en hospitales y otros centros sanitarios, en prisiones, escuelas para discapacitados, etc.
La Huerta de Montecarmelo es un ejemplo de cómo la actividad en el huerto resulta beneficiosa para personas con discapacidad intelectual, para las que el trabajo en los huertos es una vía para la integración social y la satisfacción personal.
7. Huertos decorativos
Los huertos no dejan de ser espacios verdes y bonitos, y por eso cada vez son más los restaurantes, hoteles, viviendas y todo tipo de espacios públicos y privados que hacen uso de ellos con una doble finalidad: la producción de alimentos y la mejora estética del entorno.
Podéis ver algunos ejemplos de este tipo de huertos en el artículo Huertos decorativos o en el post sobre el Huertos en hoteles.
Espero que os haya parecido interesante el artículo y que no dejéis de comentar añadiendo más tipos de huertos que no haya mencionado!
Referencias
- Blair, D., 2009. The child in the garden: an evaluative review of the benefits of school gardening. The Journal of Environmental Education, vol. 40 (2), pag. 15-38.
- Peña Fuciños, I., 2011. Terapia Hortícola-Horticultura Educativa Social y Terapéutica. Revista Autonomía Personal, nº 4, pag. 32-41.
- Fernández de Casadevante, J.L., 2011. Huertos comunitarios: sembrando otras formas de habitar la ciudad. El ecologista, nº 70, pag. 43-47.
- Zaar, M., 2011. Agricultura urbana: algunas reflexiones sobre su origen e importancia actual. Revista Bibliográfica de Geografía y Ciencias Sociales, vol. 16.
- Mejías Moreno, A.I., 2013. Contribución de los huertos urbanos a la salud. Hábitat y Sociedad, nº 5, pag. 85-103.
- Morán Alonso, N. & Ferández de Casadevante, J.L., 2014. A desalambrar. Agricultura urbana, huertos comunitarios y regulación urbanística. Hábitat y Sociedad, n.º 7, pag. 31-52.
Revisado por: Prof. Dr. Luis Ruiz García el 03/03/2021